En ocasiones, amamantar suele ser una situación difícil para algunas mamás, sin embargo, es importante mantener la calma.

Citamos el ejemplo de los hermanos gemelos, a los cuales es posible dar de pecho sin inconvenientes, entonces no hay por qué temer en los demás casos. El estímulo de la succión será doble, por lo que requerirá doble producción de leche materna.
Solo se necesita probar diferentes posiciones y ver cuál es la más conveniente para ambos lados.

Cuando se produce el parto mediante cesárea, la producción de leche suele demorarse un poco más de lo habitual, pero ello no debe impedir estar pendiente de dar de lactar al bebé. Debemos tener siempre presente, que la leche materna es el mejor alimento que se le puede brindar al niño.

Hay casos excepcionales que requieren de consulta médica como cuando existe un
problema de parto prematuro, labio leporino, síndrome de Down, entre otros. Es
conveniente investigar y buscar información que pueda ayudar, ya sea en grupos de
apoyo o experiencias paralelas.

Recomendaciones

-Mantener una higiene adecuada a la hora de amamantar al bebé, realizándose una
ducha diaria.

-Secar bien los pechos después de realizada la higiene.

-En caso de uso, cambiar los discos absorbentes cuantas veces sea necesario.

-Lavarse las manos antes de ingerir alimentos y a la hora de amamantar al niño.

-Cuidar la alimentación.

-Evitar el cigarro y alejarse de los ambientes de humo, ya que los niños tienen mayor
riesgo de padecer infecciones respiratorias agudas y de asma.

-Evitar el alcohol.

-En caso de alergias, suprimir algún alimento que pueda ocasionarlo.

La extracción de la leche

Esta práctica resulta ser muy útil en caso de que la madre tenga que ir a trabajar.
Puede extraerse la leche para guardarla y posteriormente otra persona alimente
al bebé. También es importante para evitar que se produzca una mastitis, debido
a la acumulación de la leche excesiva, en periodos en los que el apetito del bebé
disminuye.

La extracción de la leche puede hacerse de manera manual o mediante un sacaleches, para lo cual deberá realizar una consulta médica. La leche materna puede conservarse en un frigorífico dos días y congelada entre tres y seis meses en función de la  temperatura.

Un punto a tener en cuenta es mantener la tranquilidad de la madre, evitando trabajos duros y que generen estrés, lo cual puede interferir en la lactancia. Es
preferible buscar apoyo de los miembros de la familia, sobre todo en las tareas
domésticas o aquello que requiere mucho esfuerzo.

La unión y comprensión de todos es sumamente beneficioso para el buen desarrollo de la lactancia.