Muchas veces nos enseñan desde niños a conservar los envases o recipientes que nos pueden servir para reciclarlos. Es ahí que comenzamos a comprender la necesidad e importancia del reciclaje, generando menor porcentaje de basura y ayudando a conservar el medio ambiente. De esta manera, se evita que toneladas de residuos vayan a los vertederos, utilizando ciertos materiales en nuevos productos.

Existen varias posibilidades de juguetes y juegos, de acuerdo al grado de conocimiento que posean acerca del proceso de reciclaje. Compartimos algunos para que puedan aplicarlos con sus hijos.

Juguetes reciclados

Los juguetes vienen dentro de cajas, cubiertos de plásticos, en pappel de regalo… Es posible aporvechar esos materiales para hacer juguetes reciclados como:

- Una cama para muñecas fabricada con una caja de zapatos vacía y unos apapeles y carton a modo de sábanas y colchón.

- Un rompecabezas con papel reciclado. Recorta una foto y pégala con pegamento de barra en la tapa de cartón de una caja, después de dejarlo secar, corta la fotos en diferentes piezas de distintas formas y desordenalas para que tu hijo las encaje. Hay que asegurarse de que el grado de dificultad y el tamaño de las piezas es la correcta para tu hijo

- Una caja donde guardar cosas. Se puede forrar con un bonito papel de regalo y en ella se pueden guardar los juguetes con piezas que se pierden con facilidad

- Una caja de arrastre. Haz un agujero a una caja de zapatos y átale una cuerda fina de unos 50 cm. El niño podrá tirar y jugar con ella.

Puedes encontrar numerosos juguetes reciclados en manualidades infantiles

Juegos reciclados

Juego del Parchis del reciclaje

Se trata del tradicional juego del parchís, pero en esta ocasión utilizaremos los envases como si fueran fichas. Los envases son de plástico, lata y tipo brick para el jugador amarillo. Los envases de papel y cartón serán para el jugador azul. Los de vidrio para el jugador verde. El resto de la basura que no se puede separar será para el jugador gris. La finalidad es llevar los envases al contenedor adecuado, siendo el ganador el primero en colocarlos todos allí.

Material:

Se requieren lápices de colores, tijeras y dados.

Desarrollo:

Crearemos un tablero de parchís en una cartulina. Utilizaremos los colores de reciclaje que son el amarillo, azul, gris y verde. Podemos dibujar, recortar las revistas, colorear artículos o cosas que van a cada tipo de contenedor, para entender qué y cómo se debe reciclar.

Cuando vamos a arrojar la basura, pediremos el apoyo del niño, para enseñarle dónde se debe tirar los desechos de la casa.

¿Sabías que un envase que depositas en un contenedor de color amarillo, azul o verde volverá a tener nueva vida?

Debemos enseñar a los pequeños, lo que pasa con los envases, cuando se seleccionan y reciclan:

-Los de vidrio se transforman en nuevas botellas y tarros.

-Los de metal y lata se convertirán en nuevas planchas, tapas, etc.

-Los de cartón y papel se formarán en más cartón y papel reciclado.

-Los de plástico, se podrán transformar en una manguera, material aislante o tuberías.

Aquí observamos la importancia de inculcar la cultura del reciclaje, por ello, los envases resultan ser útiles porque los niños y adultos los separan y colocan en sus contenedores.

El guiñol del reciclaje

Para comprender mejor el concepto de reciclaje y utilidad, fomentaremos en los niños la idea de reutilizar los envases como juguetes o muñecos, creando una atmósfera divertida. El guiñol representa un forma sencilla y entretenida de compartir conceptos y pautas de comportamiento.

De esta manera, se cumplirán diversos objetivos como entender el concepto de reciclaje, ir desarrollando la imaginación, la puesta en escena de teatro, la historia y guión, así como transmitir a través del juego los conocimientos básicos a otras personas.

Material:

Utilizaremos envases limpios, tijeras, pegamento y gomas elásticas.

Desarrollo:

Podemos construir un teatrillo con una caja de cartón. Adicionalmente, usando otros envases nos dispondremos a preparar marionetas: recortaremos botellas para poder hacer vehículos, usando latas o envases de yogur, le daremos forma de animales, en este caso, se puede añadir papel de seda, celofán, adhesivos, etc.

También es posible inventar historias para poder enseñar a los amigos, incluso desde más pequeños, les inculcaremos por qué es recomendable separar los envases y cómo hacerlo.

Contenedores en mi ciudad

Aquí enseñaremos a los niños a que conozcan mejor su entorno más cercano, ya sea del barrio, pueblo o la ciudad misma. Los ayudaremos a descubrir los elementos que están a nuestro alcance y a las personas que realizan la selección de residuos.

De esta manera, podrán entender que los residuos que están separados se transforman en nuevos materiales, lo cual ayuda a que exista menos basura para los vertederos, contribuyendo a cuidar el medio ambiente.

Hay que ser conscientes y solidarios con esta causa, que solo tiene como fin proteger el medio ambiente, empezando la tarea desde el hogar.

Material:

Callejero, mapa de la ciudad, adhesivos de color amarillo, verde y azul.

Desarrollo:

La finalidad de la actividad es situar en un plano de la ciudad o del barrio, los lugares donde se hallan los contenedores de colores de la recogida selectiva, luego marcarlos con los adhesivos correspondientes del mismo color.

Asimismo, es posible marcar los contenedores tradicionales, las papeleras y otros puntos verdes. La opción adicional es complementar la actividad con una salida por el barrio, donde localizaremos los lugares que serían necesarios, para colocar dichas papeletas o contenedores.

Si no llegáramos a encontrarlos, podemos intentar localizar en qué lugares habría que colocarlos para ayudar a los ciudadanos a continuar la tarea de separar los envases.

La importancia de generar conciencia en los pequeños es un factor importante para reconocer el impacto que tienen nuestras buenas acciones, lo cual repercute en el ambiente y entorno cercano. Por ello, es fundamental fomentar el reciclaje entre grandes y chicos.