Todos los niños sienten una emoción incomparable cuando aprenden a andar en bicicleta, diversas sensaciones les embargan durante esa experiencia, quizá un poco de nervios y ansiedad, a la vez están las ganas de querer hacerlo solo, sin la guía de los padres, cuyo apoyo y motivación son sumamente importantes desde un principio. Después que pedalean sin ayuda, nunca dejarán de subirse a la bici.

Aprendiendo a andar en bicicleta

Diferentes pasos antes de llegar a andar en bicicleta

Antes de enseñar a andar en bicicleta, los niños han debido pasar por diferentes vehículos, los cuales los ayudan a adquirir las destrezas idóneas para su edad.

Por ejemplo, los niños empiezan a desplazarse por los pasillos, donde se sientan e impulsan con los pies, o cuando se encuentran de pie, empujan juguetes y miden la dirección.

Para fomentar la coordinación motriz, fortalecer los músculos de las piernas y aprender a dirigir piezas, los niños pueden trasladarse en pequeñas motos o coches de tres ruedas. Esto puede realizarse entre los 2 y 3 años, cuando el sentido del equilibrio de los niños todavía no está bien desarrollado.

El siguiente paso durante su desarrollo es utilizar los triciclos, los cuales ayudan en las primeras nociones de dirección y luego combinan esta práctica con el desplazamiento a través del pedaleo.

Cuando alcanzan los 4 años, los niños empiezan a familiarizarse con los triciclos. Esta etapa puede ser ideal para adquirir una bicicleta con ruedas pequeñas, que los ayudarán a mantener el equilibrio. Lo más común es que la bici le dure hasta los 6 años, de tal manera que podremos enseñarle a montar en bicicleta.

Es normal que los niños pasen por diferentes etapas antes de aprender a usar la bicicleta. Están la sensación de falta de confianza, inseguridad y el miedo a no tener el equilibrio adecuado para poder moverse. Luego de muchas iniciativas, caídas y paseos, por fin se puede lograr la ansiada meta.

Existen dos habilidades fundamentales para aprender a andar en bici: equilibrio y propulsión. Hay que enseñarles a los niños a pedalear con equilibrio, terminar con el miedo o la frustración cuando caen, por ello es mejor incentivarlo después a lanzarse al ruedo.

Aprendiendo a andar en bici paso a paso

El proceso que generalmente atraviesan los niños para aprender a montar la bicicleta es el siguiente:

-Mantener el equilibrio

Primero empezamos por enseñar a los niños a dirigir y mantener el equilibrio sin preocuparse por pedalear. Por ello, debemos:

-Quitar las ruedas pequeñas y los pedales

Bajar el asiento hasta una altura considerable donde lleguen los pies al suelo sin dificultad.

Una vez que tengan los pies en el suelo, podemos indicarles a los niños que se sienten en la bicicleta y avancen empujándola con sus pies. Luego podemos ir dándoles pequeños empujones, para que levanten los pies y vayan desplazándose con equilibrio.

Otra opción es pasear por la calle donde pueda deslizarse a una velocidad segura, ayudándose a guardar el equilibrio, mientras la bicicleta está en marcha. Si la velocidad le traicionara, enséñele a utilizar los frenos. Y si esto, también lo domina, hay que enseñarles a ir moviendo la dirección de la bicicleta, realizando giros de derecha e izquierda.

Cumpliendo con sesiones de una hora en tres ocasiones puede ser suficiente para el siguiente ejercicio:

Aprendiendo a propulsar la bici

Cuando observemos que domina el equilibrio, el siguiente paso es motivarlos con los pedales. Tenemos que sujetar con una mano, la parte central del manillar y el asiento con la otra. De esta manera, lo ayudaremos a iniciar el movimiento con un ligero empujón.

Una vez que el niño coloque los pies en los pedales comenzará automáticamente a pedalear. Cuando esté en marcha, es recomendable no sujetar el manillar mientras que pedalea, ya que no podrá sentir y entender el equilibrio. Siempre transmitamos tranquilidad y seguridad, para que los niños vean este ejercicio con total normalidad y lo repitan en otras ocasiones sin problemas.

Cuando esté iniciando el proceso, empezará a realizarlo más despacio, pero conforme avance el tiempo, será capaz de hacer unos recorridos impresionantes.

Siempre es bueno evaluarlo y corregirlo si es necesario, para que sepa cuál es la posición correcta e ideal. Si es necesario, es preferible que continúe tocando el suelo con los pies.

Una vez que el niño ya tenga la confianza en sí mismo, él mismo descubrirá la manera de pedalear estando parado y sin que lo ayuden a hacerlo. Así buscará la posición natural del pie, con la que se sienta más cómodo para iniciar el pedaleo.

Consideraciones sobre seguridad a la hora de enseñar a andar en bicicleta

Siempre es recomendable tomar precauciones para evitar golpes innecesarios y accidentes. Por ello, algunas recomendaciones a tomar en cuenta durante desarrollan la aventura de aprender a montar bicicleta.

- Usar un casco adecuado para su edad y tamaño de la cabeza, tiene que estar bien sujeto, pero sin apretar en exceso.

- Deben utilizar rodilleras y coderas como las que se usan para patinar.

- Utilizar guantes para evitar la abrasión en las manos en caso de que tenga una caída.

- La bicicleta tiene que estar adaptada a la medida del niño, con el asiento a una altura que pueda tocar con los pies el suelo.

- Usar ropa con colores fuertes y/o elementos reflectantes.

- Tener las nociones de circulación y seguridad vial.

- La bicicleta debe estar en perfecto estado, para ello, es necesario realizar un mantenimiento constante de la bicicleta.

- Verificar que las ruedas estén bien infladas, la cadena engrasada, y que los frenos tengan un correcto funcionamiento.

Errores a evitar cuando se anda en bici

- No es aconsejable utilizar una bicicleta nueva para aprender, sería mejor que unas semanas antes de usarla, el niño se habitúe a ella con las ruedas de apoyo.

- Si va a enseñar a montar bicicleta aplicando el sistema tradicional, de sostener la parte trasera de la bici, es preferible no decirle al niño que lo irá sujetando cuando sabe que habrá un instante en que lo va a soltar. Ello podría afectar su confianza. Hay que indicarle que cuando observes que está mejorando y puede hacerlo solo, lo dejarás pedaleando por sí mismo. Asimismo, deben indicarle que estarás a su lado, hasta que observes que domina la situación.

- Tratar de equipar al niño con los elementos de seguridad necesarios, para minimizar las consecuencias de una posible caída, ya que no podremos impedirlo en su totalidad como parte del proceso de aprendizaje.

El aprender a montar bicicleta brinda a los niños, la sensación de independencia y crecimiento. Acompañarlos en sus pequeños logros, hará que los padres sientan una satisfacción y orgullo que beneficia la autoestima del infante. Los niños aprenden rápido, por lo tanto, hay que estimular que utilicen la bicicleta, para que disfruten de sus paseos y excursiones.