En un universo como en el que nos encontramos, se hace necesaria la interactividad entre todos, siempre estamos relacionándonos con personas de diversas nacionalidades, viajamos y trabajamos con personas de distintos países. Al vincularnos con los demás, aprendemos acerca de muchas culturas creando un entorno multicultural con diferencias que puedan enriquecerlos y a la vez distinguirlos.

Durante la niñez empiezan a aprender a desenvolverse dentro de un entorno en el que se relacionarán y se comunicarán, comprendiendo a las personas de diversas culturas y costumbres. Asimismo, para desarrollar mejor sus habilidades de relación e interacción con otras personas, deberá presentar una menta abierta que posea gran capacidad de entendimiento. Todo ello, lo ayudará a vivir en armonía y fortalecer su vida.

En ocasiones, para los padres es difícil desprenderse de su hijo, para dejarlo madurar e independizarse. Es esencial entender que los hijos serán en el futuro ciudadanos del mundo y por ende, tendrán que estar inmersos en un universo globalizado, donde podemos practicar el valor por el respeto dentro de la diversidad en el mundo.

¿Qué es ser Ciudadano del Mundo?

Resulta ser la persona que es consciente de que existen grandes diferencias culturales, costumbres, tradiciones y países, que son distintos al suyo, pero que adquieren el compromiso responsable de vivir en respeto y armonía.

Los Ciudadanos del Mundo desarrollan ciertas capacidades únicas y abiertas que los ayudarán a considerar variados puntos de vista, buscando soluciones pacíficas a los conflictos, aceptando y disfrutando de las diferencias entre la gente e identificando puntos comunes.

¿Cómo se educa a los niños a ser un ciudadano del mundo?

Lo primero que debe hacer el niño es reconocer cuál es su lugar en la familia, en el barrio, escuela, ciudad y país, es decir en todo ámbito que lo rodea. Es fundamental asimilar los principios, tradiciones, costumbres y valores que puede brindarle la familia, lo cual se ve reflejado en sus actitudes, el niño aprenderá las bases sólidas para poder desempeñarse en la vida.

Depende de la educación que se imparte en el hogar, para aplicarlo en cualquier situación y circunstancia que se presente. Las buenas maneras y cortesía son características que acompañarán a la persona, y que dirá mucho de lo aprendido en casa, contribuyendo a crear un ambiente de respeto, aceptación y curiosidad.

Deben recordar que el niño asimilará todo lo que observa, hay que tener cuidado con el ejemplo que le damos. Asimismo, ellos estarán pendientes de las acciones que los rodean, y pueden aprender algo que no sea adecuado, por ello la importancia de contar con un cimiento ideal de valores y principios inamovibles.

Diferencias y similitudes en la diversidad

Cuando los niños van aprendiendo sus propias raíces irán reconociendo que no deberán temer que las cosas sean diferentes, comprenderán que son cosas naturales que los enriquecerán, y que a la vez, los demás se beneficiarán también con nuestras costumbres. Inclusive, entenderá que gracias a ello, se podrá vivir en una ciudad mucho más interesante.

Podemos incentivar su curiosidad preguntándoles frases como: ¿te has dado cuenta de…? O ¿por qué consideras que hacen…?. Una situación se produce cuando asiste a una celebración de cumpleaños o fiestas de otras personas, lo cual representa una ocasión para comparar hábitos y costumbres, podemos explicarles las similitudes y diferencias que existen entre las personas y culturas.

Es fundamental que aprenda a aceptar a las personas tal y como son, con sus costumbres y creencias, base clave de la tolerancia y respeto a las diferentes ideas y creencias.

Sugerencias para convertir a nuestro hijo en un ciudadano del mundo

Es recomendable que guiemos a los hijos para que conozcan más allá de su entorno, de tal manera que puedan aprender de otras culturas y países, su gente y estilos de vida.

Todo lo que podamos ofrecerle como experiencia de vida será enriquecedor para su desarrollo emocional, influyendo en su forma de ver las cosas y entender mejor las circunstancias que se presenten. El vivir día a día las situaciones resulta alentador, ya que se aprende de la experiencia misma, más allá de lo que se encuentra en los libros, revistas o películas. Así podrán descubrir, que todos los seres humanos tenemos sentimientos e ideas en común, a la vez que existen diferencias.

Algunas acciones que pueden ayudar a los niños:

-Ser su modelo: Los padres son los modelos a seguir de los hijos. Por ello, hay que demostrar interés y respeto hacia las personas.

-Ir a restaurantes de otros países: Hay que enseñarles a probar nuevos sabores a partir de los alimentos que utilizaremos en la dieta diaria. Podemos llevarlos a restaurantes de diversas culturas y disfrutar de la variedad que nos ofrecen.

-Paseos por la ciudad: En las ciudades existen zonas en las que habitan personas de otros países. Podrías ir con los niños para que observen estilos de vida, cómo visten, cómo son sus tiendas, así como saber de qué manera celebran sus fiestas. Al viajar a otro país, incluso el enriquecimiento cultural será mayor, porque ampliará su panorama.

-Visitar museos o exposiciones: Para los niños resulta una experiencia inolvidable e interesante visitar los museos o exposiciones acerca de otros países y culturas. Así también aprenderá más sobre historia y arqueología.

-Asistir a un concierto o música en la calle: Como lenguaje universal, la música o danza permite que las personas puedan expresar sus sentimientos, ilusiones y orgullo cultural. Tal es así, que el hecho de respetar y disfrutar la música se considera una forma de ser Ciudadano del Mundo. Escuchar música de otros lugares ayudará a los niños a construir esa capacidad.

-Aprender historia y culturas antiguas: Aprender situaciones sobre las culturas antiguas y comprender la historia del mundo, enseña a los niños cómo evolucionamos y cómo las culturas han influenciado en la sociedad y costumbres.

Los niños pueden ampliar sus conocimientos del mundo y todo lo que lo rodea a partir de experiencias multiculturales. Ello, podrá ayudar a reforzar los conceptos de aceptación, tolerancia, amabilidad y hospitalidad. Lo que refiere al concepto de diversidad también se puede aplicar en base a juguetes,  juegos y libros. Es importante que los niños aprendan y conozcan la visión del mundo al que pertenecen y la participación activa del hogar es fundamental para ello.