Algunos padres consideran que sus hijos no leen lo suficiente para su edad y se cuestionan el hecho de cómo hacer para que se interesen más por la lectura. No es una tarea imposible, con paciencia y una correcta metodología podemos lograrlo.

El aprender a leer y sobre todo hacerlo bien, hará que comprendan y asimilen la base de futuros aprendizajes. Es posible fomentar la lectura interactuando con el pequeño, contándole un cuento, oyendo cuando está leyendo, comentar y trabajar el vocabulario. Los padres cumplen un papel crucial en ese sentido.

Los pequeños presentan dotes para la lectura, su capacidad natural está determinada por el grado de madurez y potencial biológico que poseen. Incluso hay técnicas psicológicas que los padres suelen utilizar en el hogar para poder ayudar a los niños a que empiecen a leer más, disfrutando de lo que están leyendo.

En el mercado tenemos una gran variedad de textos que puedes leerle a tus hijos desde que son bebés, de tal manera que cuando vayan creciendo estén familiarizados con la lectura. Existen cuentos, libros para leer y colorear, así como revistas infantiles. Los libros deben estar al alcance del niño, ya sea en el salón, en su habitación o en el lugar preferido. Si deseas contribuir a que el niño adquiera el hábito de lectura, puedes enseñarle nuevas técnicas, que estén basadas en los principios psicológicos del aprendizaje por observación.

¿Si utilizo estas técnicas mi hijo leerá muchos libros al mes?

Todo depende de la edad del niño, la capacidad que tenga y de los libros elegidos. Se recomienda aplicarlas para tener algún alcance de la mejoría. La misión de los padres es desarrollar al máximo el potencial de sus hijos.

Técnica núm1:  ser un modelo para el niño y asociar la lectura con la interacción con los padres:

Los niños siempre siguen el modelo de sus padres y disfrutan pasando buen tiempo con ellos y más aún si comparten actividades como la lectura. Recomendamos:

- Leerles a los niños desde que son todavía pequeños.

- Leer mientras están en su cama.

- Leer diversos textos durante la semana e ir aumentando el número.

- Hay que evitar ver demasiada televisión delante de los hijos.

- Incentivar la visita a biblioteca y librerías.

- Enseñarles y contarles que los padres también leen en el trabajo.

Técnica núm. 2: enseñar hábitos, los niños siguen las recomendaciones de los padres.

Se sugiere:

- Emplear juegos con letras, palabras y abecedarios.

- Animarlos a que vean programas y series de televisión con temas educativos.

- Enseñarles a conseguir libros en las librerías o bibliotecas que se adapten a los gustos que tienen los niños y a su edad.

- Siempre es bueno retornar a los libros que hayan representado una dificultad para los niños, de tal manera que observes los progresos que han tenido.

- Llegar a pequeños acuerdos con los niños, en los que restrinjan el acceso a la televisión durante un tiempo determinado.

Técnica núm.3: reforzar y recompensar las acciones positivas del niño, para que así se encuentren motivados a seguir leyendo.

-Reconocer cuando los niños han progresado en la lectura y han extendido la cantidad de libros leídos.

-Felicitar al niño por los libros que va leyendo, reforzándolo para que sea consciente de los avances que ha realizado y lo que va asimilando.

-Animarlo a participar en los talleres de lectura, escritura o teatro.

-Adquirir programas multimedia para reforzar lo que compete al lenguaje, aplicando ejercicios adaptados al grado de desarrollo que presentan, ya sea en la lectura o en la ortografía y lenguaje.

-Hay que mostrarle que tenemos interés en los libros que está leyendo, preguntándole qué ha aprendido o ha llamado su atención.

Técnica núm.4: estimular su pasión por la lectura y propiciar situaciones para ello.

-Recuerda que debes tener libros infantiles por toda la casa, en el salón, en la habitación y aunque suene exagerado, incluso en el baño.

-Cuando salimos por ejemplo al médico, podemos llevar un libro para leerlo durante el tiempo de espera.

-Incentivar al niño que lea a sus hermanos o familiares menores que él.

-Cuando salimos de vacaciones, se recomienda llevar libros para que formen parte del equipaje.

-Incentivarlo a leer carteles o revistas infantiles.

Si seguimos estas pautas contribuiremos a que los pequeños de la casa demuestren entusiasmo cuando quieran leer. Enseñarles la importancia de la lectura, guiándoles con los libros más adecuados para su edad, ayudará a que cuando sean más grandes, no les sea dificultoso seguir y concentrarse en un libro o revista.