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La estimulación y desarrollo de la creatividad del niño es ideal desde pequeño, porque es en este momento en el cual podemos prepararle y estimularle en el pensamiento creativo, obteniendo mejores resultados en el futuro. Ello hará posible que encuentre soluciones a las dificultades y desafíos que se le presenten en la vida, de una forma sencilla y sobre todo original.
Cuanto existan más posibilidades de interactuar y explorar su entorno, el niño desarrollará su creatividad al máximo. La tarea de los padres es determinante y debemos brindarles todas las opciones que puedan surgir.
El primer paso consiste en obtener un conjunto de experiencias que ayuden al niño a tener una especie de base de datos, a partir de la cual puedan explorar su imaginación y aplicar la creatividad en diferentes situaciones.
En ese sentido, el contacto con la madre es primordial. Cuando ésta le observa, acaricia, le habla o expresa su cariño, ayuda a que el niño tome conciencia de su propio cuerpo, diferente a los demás, a lo igual que sus destrezas y capacidades. El pequeño manifiesta su creatividad poco a poco, demostrando gestos o acciones que permiten que exprese sus necesidades de afecto, alimentación, bienestar y abrigo. Más adelante, incorporará el lenguaje y acciones que le sirvan para interactuar con los demás.
Estimular la creatividad es básico para todos los seres humanos, especialmente para los niños, que apenas están creciendo y necesitan desarrollar la capacidad de resolver problemas con soluciones novedosas. Leer el resto de este artículo ⇒
El juego es la actividad del niño que permite que se forme y prepare tanto a nivel físico como intelectual con el objetivo de conseguir una madurez y capacidades apropiadas para hacer frente a la vida adulta, seria y con dificultades.
Se puede describir el juego como la respuesta del niño a un instinto natural, a través del juego, el niño satisface su necesidades de relación con el medio y sus semejantes, cogiendo, mirando y experimentando con todo lo que le rodea.
El motor básico que alimenta el juego del niño es la curiosidad. La necesidad de conocer y comprender todo conduce al niño a una aproximación con las cosas que le rodean, permitiéndole así conocerlas y entenderlas con su mente.
El juego tiene sus orígenes más allá de la cultura, tradición y la costumbre. Más bien responde al instinto natural y a la necesidad de comunicación del niño. No obstante, la cultura y la tradición sí han marcado el papel del juego en el niño, atendiendo a cuestiones decisivas como: a qué jugar y cómo jugar. Leer el resto de este artículo ⇒
Jugar a solas con juguetes cuando se es un niño tiene sus beneficios. Si bien la presencia de los padres es muy importante, es favorable darle su propio espacio y dejarle de vez en cuando solo, al menos por un breve lapso, para permitirle que halle entretenimiento por sí mismo.
Jugar solos les permite entre otras cosas, ser más independiente, más autónomo, y fomenta su creatividad e imaginación.
Sin embargo, es común en niños menores de dos años, sentir que no pueden jugar sin la compañía de un adulto. Esta actitud es perfectamente normal, no obstante, debe favorecerse que, poco a poco, el niño aprenda a jugar sólo. Y es que, por más pequeño que sea el niño, se le debe ir enseñando que el padre no puede estar junto a él todo el tiempo.
Jugar a solas con sus juguetes es una gran oportunidad para los niños. Les permite dar rienda suelta a su imaginación sin temor a ser observados, desarrollar su creatividad y ser mucho más autónomos. Además, les ayuda a explorar lo que se encuentra dentro de su entorno.
¿Qué ocurre pasa cuando el adulto interviene todo el tiempo? Entonces, el niño pierde su curiosidad natural por descubrir nuevas cosas y se vuelve un ser pasivo.
¿Qué ocurre cuando el niño juega solo con los juguetes? Según los especialistas, ocurre todo un proceso en el que el pequeño organiza su propia estructura para salir airoso del juego. Durante esta etapa, el infante descubrirá para qué sirve determinado juguete, cómo funciona y cómo puede relacionarse con él. De esta manera, el niño no sólo obtiene experiencias nuevas, sino que además vuelca sus emociones internas y se comunica con su yo interno. Esto permitirá a los padres conocer más del pequeño. Leer el resto de este artículo ⇒
El juego simbólico es uno de los más habituales en los niños de entre 3 y 5 años. Desde que son pequeños, los niños no dejan de sorprendernos simulando acciones habituales que con la sonrisa o el brillo de los ojos nos señalan que ellos y nosotros los padres sabemos bien que, aún siendo una escena muy similar a lo real, solamente se trata de un juego. De este modo por ejemplo, es diferente estar durmiendo que hacerse el dormido.
Los juguetes como muñecos o vehículos (pequeñas miniaturas del mundo real) tienen una fuerte relación con el mundo real y estimulan la aparición de juegos simbólios o de interpretación de roles en los niños. Por ejemplo: jugar a las mamás y papás, hablar por teléfono de juguete, cocinar en la cocina de juguete, conducir un cochecito por una imaginaria autopista, hacer volar un muñeco con superpoderes… son juegos simbólicos propios de la infancia.
El juego simbólico o de imitación nos muestra el grado de conocimiento y de comprensión que el niño adquiere de las acciones de los adultos y su mundo. Este tipo de juego se sustenta en lo aprendido por la experiencia del niño. Así por ejemplo, jugar a las mamás y los papás estará relacionado con labores o tareas hogareñas como meter en la cuna al bebé, bañarle y cambiarle los pañales, cocinar, limpiar la casa, leer cuentos, ir a hacer las compras, atender las visitas… etc.
Por otro lado, otras actividades más cercanas al mundo laboral serían: atender una tienda, dar clases, curar y sanar enfermos… etc.
En ambos casos el juego revelará las acciones y las rutinas que los niños aprenden del entorno de sus padres o adultos que les cuidan.
Lo mismo ocurre con los personajes de ficción, dibujos (monstruos, robots, extraterrestres, superhéroes, chicas superpoderosas, animales que hablan… etc) y las series de la tele, todos son representados habitualmente por el niño bien directamente, bien a través de sus muñecos. Leer el resto de este artículo ⇒
A decir verdad, podemos decir que el juego es la actividad más importante para un niño pequeño.
El juego va a favorecer su desarrollo psicosocial y físico. A través del juego y los juguetes el niño consigue estimular el desarrollo motor, puesto que va hacer que el niño se mueva, corra, salte, camine…etc. También va a permitir desarrollar su inteligencia, porque el juego lo empuja a explorar el mundo que le rodea y arealizarr acciones con los objetos disponibles hasta conocerlos mejor.
Los juguetes y el juego estimulan el desarrollo emocional, los niños por medio del juego expresan sus sentimientos y a menudo aclaran conflictos emocionales. A su vez, favorece el desarrollo social porque a través de éste el niño aprende a: jugar con otros niños, respetando unas reglas, compartiendo y conviviendo.
Los juguetes y el juego permiten al niño:
Hay diferentes clases de juguetes y juegos:
Los padres pueden ayudar a sus hijos a aprender a través de juegos, nombrándo los objetos con los que están jugando, mostrándoles las características y para que sirven las cosas que van manipulando, respondiendo sus preguntas, incitándoles a inventar nuevos juegos y dejándoles explorar e imaginar. Leer el resto de este artículo ⇒
Es innegable la importancia del juego para el desarrollo psicomotor del niño. No sólo es una excelente actividad física, sino que estimula su inteligencia, su imaginación, creatividad y le permite interactuar mejor con otras personas, ya sea de su edad o mayores.
Entre algunos de los beneficios que brinda el juego, tenemos:
- Le permite socializar. Además de obligarlo a comunicarse con sus compañeros de juego, el niño aprende a tener un trato equitativo y a aceptar puntos de vista distintos al suyo.
- Desarrolla capacidades psicomotoras. Para jugar, debe poner a prueba su memoria, su capacidad de aprendizaje, de expresarse, así como a correr, tener equilibrio y saltar.
- Aprende de superación personal. Esto ya que aprende a ganar y perder y a ser mejor para poder destacar. Leer el resto de este artículo ⇒
El juego y los juguetes en la niñez son de suma importancia para el crecimiento y desenvolvimiento del niño. Además, es su actividad favorita y a la que más dedicación y energía le dan. Tomemos en cuenta que el juego es el ensayo del niño del papel que, en unos años más, desempeñará en la vida real, ya que en este mundo lúdico, pone a prueba sus emociones y conocimientos, además de reforzar sus relaciones interpersonales.
Pero, ¿qué sentimientos despierta en el niño el juego y los juguetes? Pues sin duda placer, ya que se divierte, ríe y goza con los juegos, y mantiene su ánimo arriba. También le proporciona libertad, ya que lo hace espontáneamente y sin ataduras o normas. De hecho, lo hace por el mero hecho de jugar, no busca ninguna finalidad determinada. Juegacon o sin juguetes porque le gusta.
Este hecho resulta opuesto para los adultos, que en cambio, no ven el juego y los juguetes como algo obligatorio en sus vidas dado que no les proporciona ningún beneficio tangible, a diferencia del trabajo a través del cual obtienen beneficios a nivel económico y profesional. Tal es así, que muchos adultos sólo se centran en la importancia de que el niño, desde la infancia, aprenda el valor de las cosas que tienen utilidad y lo introducen en actividades que le servirán para cuando sean adultos. Este enfoque es erróneo. Leer el resto de este artículo ⇒
Llamamos juguete a aquellos objetos elaborados para que los niños jueguen. Sin embargo, son juguetes también todos aquellos artilugios que crean los más pequeños para su diversión y otros tantos objetos que no fueron elaborados con ese fin, pero que son igualmente son usados por ellos para entretenerse.
Así, podríamos llamar juguetes también a una rama, un pedazo de madera, una escoba, una cacerola, unas piedritas…, pues si los niños las emplean para jugar, son válidas también dentro de este término. En ese sentido, es irónico que se consideren a juguetes a peluches o enormes aparatos que, por lo complejo o grandeza de su estructura, terminan empolvándose en el salón de juegos y no se les termina dando el uso para el que fue creado.
Desde este punto de vista, consideremos el juguete no sólo como aquel artículo que compramos en la sección juguetería de una tienda por departamento, sino como todo aquello que el niño considera como elemento de juego. Leer el resto de este artículo ⇒
Como dijimos, muchas variables hay que tomar en cuenta a la hora de elegir el juguete ideal. Si bien la edad es un factor importantísimo, a la hora de comprar un juguete pedagógico también hay que cuenta el lugar donde crece el niño.
Esto lo saben los educadores, por ello, a la hora de escoger juguetes pedagógicos para un grupo de niños, determinan previamente, no sólo el lugar de juegos, sino analizan previamente el entorno familiar y el número de horas que pasan en la escuela. Estos puntos son sustanciales en la elección de los objetos para jugar. Leer el resto de este artículo ⇒
La socialización infantil conocida también como inteligencia emocional. Se centra en las capacidades sociales y características emocionales del niño que forman su carácter, determinan su personalidad y como interactua con el entorno social.
El área socio-emocional trata principalmente la habilidad que tiene el niño para identificar y expresar sus sentimientos y emociones. Abarca también, la suma de experiencias afectivas y sociales que el niño siente como individuo único, distinto a los demás, a la vez que comprendido y querido. Con la capacidad de relacionarse con el resto de personas con normas comunes.
Para desarrollo socio-emocional del niño es básica la participación de los padres y familiares para crear vínculos afectivos, porque hasta los 2 años el niño interactúa prácticamente solo con ellos. Por ello, es importante acunarlo, darle seguridad, y hacer que se sienta un miembro más de la familia que siempre le dará atenciones, amor y cuidados para su buen crecimiento.
Los adultos del entorno constituirán para el niño un ejemplo y referencia a la hora de aprender como actuar frente a otros y como relacionarse con ellos. En resumen, como ser una persona social. Leer el resto de este artículo ⇒