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¿Cómo va mejorando el niño sus destrezas? A través del ejercicio continuo de labores de exploración del entorno y de poner a prueba sus capacidades. Ambos representan retos para el niño y la búsqueda de perfeccionamiento contribuye a mejorar sus capacidades motrices.
Gracias al juego, el niño obtiene un estímulo que le permite recrear en su mente una imagen de su cuerpo y el entorno. Con estas imágenes, desarrolla su percepción sensorial y aprende a controlar los elementos que componen el mundo que le rodea. Asimismo, adquiere conciencia de qué es exactamente lo que le rodea, en dónde se encuentra y a equilibrarse dentro de este universo.
¿Qué entendemos por motricidad? Pues llamamos así a la capacidad del niño de explorar y desplazarse por su entorno. Dentro de estas habilidades se considera el poder caminar, saltar, correr, bailar, pintar… entre otras.
Hay que indicar que es importante que, durante la primera infancia, se incida en el desarrollo de la motricidad fina, esto es, por ejemplo, trabajar en los movimientos de la mano. Esto puede lograrse a través del dibujo, la pintura y la utilización de juguetes para montar. Tomemos en cuenta que a partir de los dos años, el niño ya es capaz de dominar varias funciones motrices, las cuales desplegará aún más al momento del juego. Leer el resto de este artículo ⇒
Pintar es crear un mundo diferente. Es el reflejo de nuestros pensamientos y sentimientos. Para los niños es la primera forma en la que se comunican. Con el pasar de los años muchos van perdiendo esa sensibilidad por el arte con el que todos nacemos. Con el maletín de pintura infantil KOLORO DA VINCI su hijo podrá ser todo un artista.
Además de estimular la imaginación, estimula la creatividad y la capacidad de concentración. También tranquiliza y ayuda a que los niños expresen sus miedos. Los pequeños empiezan a explorar su mundo a través de los rotuladores, lápices y pinturas. Cuántas veces nos hemos quejado de los dibujos que hacen en las paredes. En realidad, debemos comprenderlos y alentarlos a expresar su mundo interno. No están arruinando nada, al fin y al cabo es una pared. Un consejo es pegar papel en las paredes y dejarlos que dibujen ahí. Hay que tener en cuenta que no debemos dejarlos solos mucho tiempo, hay que estar atentos porque se pueden introducir los colores a la boca. Aunque no sean tóxicos pueden producir una asfixia.
Al principio debemos incentivarlos a dibujar y a pintar. No hay que regañarlos porque se salgan de las líneas al pintar o por si colorean de cierto color una cosa que no es asi. El maletín de pintura infantil KOLORO DA VINCI está diseñado para niños a partir de los 6 años. Está diseñado en madera y dentro de él encontrará: 28 lápices, 24 rotuladores, 20 ceras plásticas, 18 pasteles, 10 acuarelas, una paleta, dos lápices, dos pinceles, un sacapuntas, un pegamento, cuatro clips, dos pinzas, una esponja, una goma, una regla, un botecito de agua y una grapadora. Todos los elementos están hechos con materiales no tóxicos.
La destreza manual es también un beneficio. Dibujar y pintar es el primer paso antes de empezar a escribir. Ahí se aprende a agarrar un lápiz. Recibir un regalo como el que vende la tienda Imaginarium sería fabuloso. El pequeño podrá crear grandes obras de arte que luego exhibirá con orgullo. No olvide que brindarle nuestro apoyo es fundamental para el desarrollo de su personalidad, no lo desaliente. Aliéntelo a crear.
Made in China y comercializada por la firma Bizak aquí en España, Aqua Doodle es como han bautizado a esta ingeniosa pizarra de juguete recomendada para niños desde 18 meses de edad (aunque algunos padres pioneros ya se animan a estimular con ella a infantes más pequeños).
Esta pizarra de tela es sumamente práctica porque podemos doblarla y guardarla en cualquier sitio de la forma más simple. Además, se trata de un juguete seguro y confiable, ya que al estar hecho con materiales no tóxicos o contaminantes (algodón, poliéster y plástico) los pequeños pueden llevarlo a su boca sin riesgo alguno, ahorrándonos preocupaciones y dolores de cabeza.
Aqua Doodle es también una forma original de que los niños aprendan jugando, pues con los coloridos dibujos y símbolos alfanuméricos de su marco les da una cálida bienvenida al fascinante mundo de las letras y los números.
Pintar con esta pizarra es tan sencillo como divertido. Podemos hacerlo pasando las manos mojadas sobre su tela (como dactilopintura) o con un rotulador recargable, que presenta dos partes que se enroscan y calzan con firmeza. Para utilizarlo, debemos llenarlo de agua y dejar su punta mirando hacia abajo hasta que se humedezca y quede lista para dibujar.
La punta del rotulador es de fieltro, lo cual permite que no se deforme por el uso frecuente o por algún que otro mordiscón. De este modo, al ser este accesorio lo suficientemente grueso y resistente, resulta ideal para que lo manipule un niño de corta edad.
Otro punto a favor es que para dibujar sobre ella no se requiere hacer demasiada presión: apenas el simple contacto del dedo o el rotulador húmedos bastan para pintar en su superficie. Por lo tanto, si recordamos que la motricidad fina de niños tan pequeños aún está en desarrollo, Aqua Doodle es el juguete perfecto para acompañarlos en esta etapa. Y además de estimular su coordinación manual, esta pizarra es la mejor aliada para impulsar su creatividad e imaginación.
Para conservarla en buen estado, sus fabricantes recomiendan pintar sólo con agua, ya que otros productos pueden mancharla. Tampoco se debe lavar (ni en seco o con productos de limpieza), frotar o sumergir en agua. Plancharla, dejarla al sol o cerca de sitios a alta temperatura también son acciones que pueden causar su deterioro.
Ya lo sabéis: a la hora de elegir un juguete para nuestros pequeños capaz de entretenerlos, estimular su creatividad e incentivar su imaginación, Aqua Doodle es una opción inmejorable.